jueves, 17 de marzo de 2022

HENRRY JOSÉ MAGRINI DAVALILLO

 



El señor Magrini en la actualidad es un trabajador de la economía informal, quien me solicitó escribiera su Crónica. Así que conversamos y me contó su vida, sus creencias y sus vivencias.

“Profesor Muñoz, yo nací en el Centro de Salud “Dr. Carlos Diez del Ciervo, hoy Hospital Alí Primera, en la comunidad de La Vela, lo que actualmente es el sector Alí Primera, donde este cantautor vivió por muchos años. Siempre he sido de contextura flaca, por eso todos me conocen como “el flaco Henrry José”. Mis padres fueron Emilio José Magrini Ávila y Ana Pastora Davalillo de Magrini. Mis abuelos paternos: Ítalo Magrini y Eva Ávila de Magrini, y abuelos maternos fueron José Isaac Bracho y Francisca Davalillo. Ellos no eran casados, como mucha gente de San José de Cocodite. Recuerdo a mi bisabuelo paterno, se llamaba José Atilio Magrini, era italiano y llegó a Paraguaná en 1903. Mis tíos paternos fueron José Ítalo, Francisco, Zenaida, Macrino, Rosario y “Chule” -no recuerdo el nombre de pila-, Italia y Marina, todos de apellido Magrini. Me casé con Magalis Josefina Davalillo, si mal no recuerdo en 1986. Mis hijos son Danny Daniel, Eduis Jesús y Alianny Carolina, y tengo dos nietos: Yoel y Diego Magrini”.

“Estudié en el “Mario Briceño Iragorri” de Amuay hasta el 5º grado, el 6º lo saqué por la Misión Robinson y recientemente me gradué de bachiller por la Misión Ribas. Mi primer empleo fue a los 15 años en los Astilleros Amuay, propiedad del señor Jose Gómez, portugués. Hacíamos reparaciones y construcción de todo tipo de embarcaciones. Ahí trabajé carpintería, calafateo y fibra de vidrio en el año 1970. A los 25 años ingresé a la Fluor Caribbean Inc., y trabajé como carpintero entre 1979 y 1982. Más tarde trabajé en algunas paradas de mantenimiento en las refinerías de Cardón y Amuay hasta 2016, y actualmente sigo trabajando pero en la economía informal: vendo artículos varios, como loterías, triples, revistas hípicas y periódicos. Recibo mi pensión y mis bonos”.

“Profesor Muñoz, yo siempre he sido un hombre de ideas de izquierda, y si vuelvo a nacer bajo ninguna circunstancia lo dejaría de ser, y me pregunto, hablando de la situación país, ¿cómo el aumento de medio petro llegará también a nosotros los trabajadores informales? Porque hay muchas cosas que agradecer, como las vacunas contra el COVID, que está azotando a nivel mundial y aquí también se tomaron acciones para combatirlo; yo veo que el gobernador Víctor Clark como la alcaldesa María Arcaya están realizando tanto en el estado Falcón como en el municipio Los Taques un esfuerzo sincero por resolver los problemas de los servicios públicos y las necesidades de la población.”

“En mi casa hacemos las tres comidas diarias gracias a la venta solidaria de alimentos del CLAP en Jayana - aunque las bolsas deberían llegar para su venta fija cada 15 días, como dijo el Presidente Maduro-, así como a mi pensión, los bonos que recibo y el producto de mi trabajo, que realizo en las playas de Villa Marina.”

“Como anécdota mía le cuento: cuando tenía 11 años regresaba del cumpleaños de un vecino y me accidenté, y me enyesaron el brazo. Mi padre siempre hablaba de las propiedades del ron de culebra morrona –la ciega- y la manteca de esa serpiente. Él estaba reacio a llevarme al hospital a quitarme el yeso, porque cuando fui al principio lo tenía fracturado, y el hueso radio lo tenía dislocado; recuerdo que dos doctores lo llevaron a su sitio mientras yo gritaba y pateaba hasta más no poder. Los gritos se escucharon en todo el Centro de Salud. Mi padre decidió quitarme el yeso él mismo. Al mes, me quitó el yeso con una segueta y me dijo “Aprieta esta pelotica de goma todo el tiempo que puedas”. Me llevó a un famoso curandero de Guanadito, de nombre Juan Sánchez, quien me indicó el ron de culebra y me dio las primeras fricciones, luego continuó mi padre masajeando el brazo y me aplicaron manteca de saruro, y el dolor desapreció por completo hasta hace poco, después de tantos años volvió el dolor.”

 “Profesor, yo creo en la Revolución Bolivariana, en el legado del Comandante Hugo Rafael Chávez Fías y en su hijo Nicolás Maduro Moros, quien vuelve a demostrar que es un gran estratega. Pienso que nuestra patria ha resistido años de bloqueo y restricciones económicas que la ultraderecha le solicitó a Trump, y que ya venía desde los tiempos de Obama, aplicándose al pueblo pero con menor intensidad. Para mí, lo que los gobiernos norteamericanos han querido siempre es hacer de Venezuela una colonia, como lo es Puerto Rico, y de esa manera apoderarse de nuestras riquezas naturales. Entiendo que la guerra entre Rusia y Ucrania obligó a Estados Unidos a enviar a la sede del gobierno nacional, a Miraflores, una comisión de alto nivel a solicitarle que les venda petróleo… Que yo sepa aquí nunca se les ha negado ni se les negará esa venta.”

“Lo que sí me parece relevante es que hayan reconocido que el Presidente Constitucional de la República Bolivariana de Venezuela es Nicolás Maduro Moros, electo en elecciones libres y democráticas. Es importante que hayan aceptado que Venezuela es un país libre, soberano e independiente; que no es ninguna amenaza para los Estados Unidos, que el diálogo y el respeto son esenciales en todo los niveles, y que sin intromisión en los asuntos internos de cada quien se pueden establecer relaciones comerciales que beneficien ambas naciones.”

“Ahora toca esperar por el siguiente paso, que sería levantar el bloqueo y las restricciones económicas, la devolución de los bienes venezolanos que tienen allá. Mr. Biden, el pueblo venezolano espera su siguiente paso.”