viernes, 28 de julio de 2017

· EL HOSPITAL CALLES SIERRA ·

El próximo 27 de julio del 2017 el Hospital IVSS Dr. Rafael Calles Sierra, de Punto Fijo, cumple 30 años de inaugurado. Aprovecho la oportunidad de estar hospitalizado en él, motivado a un accidente de tránsito sufrido en días pasados, para agradecer y darles un efusivo reconocimiento al Dr. Zerpa Contreras, maestro de maestros, y al honorable cuerpo de estudiantes, doctoras y doctores de postgrado. Realmente estoy impresionado. Créeme, pueblo falconiano, contamos en este hospital con un equipo de médicos y estudiantes de postgrado que están entre los mejores del mundo, nada que envidiarle a los de otros países. Son eficientes y buenos.
También aprovecho a enviarle un saludo al personal de Enfermería y de salud, camilleros, camareras, policías destacados; en fin, esta gente lo hace tan bien como lo están haciendo en Barrio Adentro nuestros médicos del pueblo, que se están formando y se han formado. Además, quiero decir que, por cuestiones de la vida, por esos virajes que da la existencia, me encontré acá con una familia, los Ramos, que conocí hace unos 35 años, cuando era Subdirector del Liceo de Bariquí, municipio Zamora, siendo el Director entonces el español José Antonio Riaño, quien junto con el pueblo de Bariquí construyó por primera vez un Liceo-Escuela en el país.
Aquí, en mi convalecencia, valgo la ocasión para enviarle a nuestra bella y hermosa Gobernadora un sincero agradecimiento por su preocupación por mi bienestar, sé que ella es una mujer de muy buen corazón; así como a Rosa Borges, Aida González, Yesuán, Ishtar y Hécate Muñoz. En mi caso particular, requiero dos placas para mis muñecas fracturadas, que con el favor de Dios pronto serán colocadas para poder usar mis manos (como Cronista, escribir es indispensable en mi trabajo), y para mi pie, cuya solicitud con informe y presupuesto fue introducida a su Despacho, esperando por su visto bueno. El Alcalde Iglesias requirió y recibió copia de la misma solicitud, por lo cual le agradecemos ese gesto solidario mi familia y yo.
Durante mi estadía he escuchado y he visto cosas asombrosas. He visto cómo el cuerpo de estudiantes de postgrado –los mejores de Venezuela- se sacrifican las 24 horas del día, dejando a un lado a sus familias para estar al pie del cañón de sus pacientes, en este gran combate por la salud y la vida. ¡Estos muchachos son grandes! Estoy seguro que cuando se gradúen ya como Especialistas, serán útiles a la Patria. Reitero mi efusivo saludo para ellos. Gracias Dr. Zerpa Contreras, y muchas gracias a los cirujanos de mano que me van a operar. Por toda la eternidad se los voy a agradecer. Aquí estoy.
A mi compañero de infortunio, Luis Ramos, –quien lamentablemente se volcó trabajando duro duro, como los falconianos, en su camión de transporte de pescado- le quiero enviar un saludo sincero, sobre todo a su familia, quienes hicieron una acción muy noble conmigo: me facilitaron un colchón antiescaras, ya que yo no tenía uno. Sobre todo, este reconocimiento se lo hago a Doña María y a su esposa Sol.
Del mismo modo, quiero agradecer a las personas que me socorrieron pronta y eficientemente en ese momento crítico: el Alcalde “Pepe” Iglesias, el personal de Protección Civil, especialmente al ciudadano Alí Morales, las compañeras de la Alcaldía Dra. Fabiola y Lcda. Liliana Gómez y al ciudadano Julio Molina. Mi eterno agradecimiento.

Yo no soy hombre que teme a la Muerte. Sobreviví al impacto y seguiré sobreviviendo. Soy hombre de combate y luchador, por ello hago un llamado a la Paz a todos los venezolanos, desde mi lecho de convaleciente, a la concordia, a la reconciliación y a la convivencia por el bien de la Patria. ¡Viva la Paz, viva la reconciliación entre los venezolanos!

martes, 18 de julio de 2017

· MARINA JORDÁN ·

Desde hace tiempo sentía vivo interés en conversar con Marina Jordán, una de las primeras locutoras de Paraguaná, quien nació el 03-03-1933 en Guanadito, municipio Los Taques; no se había presentado la oportunidad de hablar con ella. Su nieto, el periodista José Marcelino Ávila, me llevó hasta la casa donde vive con unos familiares y entablamos un cordial diálogo. Al verla, algo me dijo que yo ya conocía a esta otoñal y encantadora abuelita, que conserva su melodiosa y dulce voz.
Marina Jordán, por allá en la década de los años 60 fue parte del grupo selecto de locutoras de Radio Aeropuerto, en Maiquetía, hoy estado Vargas: mi hermana Gladis Pastrano Freites era para esa época secretaria en esa emisora y más de una vez la acompañé a la radio. Cuando me refirió que trabajó en la radio porteña, le pregunté si había conocido a mi hermana. Mirándome fijamente me dijo Doña Marina: “Estimado señor, yo recuerdo a su hermana, una mujer alta y delgada, muy pendiente de un hermano de nombre Rafael Simón, preso por guerrillero en la isla del Burro, en el Lago de Valencia”. En realidad, me sorprendió la prodigiosa memoria de esta doñita y que me hablase de mi pariente con tanta precisión: digamos que fue inesperado y extraño.
“Profesor Muñoz Freites, yo soy hija natural y le agradezco no me pregunte quién era mi padre; mi madre fue Graciela Jordán, pero me crió mi madrina Begoña Ocando, que a su vez era mi tía; los principios morales se los debo a esa señora, mi madrina abandonó el olor de los chivos por el del pescado, ya que se fue a Amuay y se casó con José María Romero y en su casa tenía la estafeta de correos”.
“Me casé 3 veces, la primera a los 16 años con un andino de nombre Enrique Rodríguez, luego con Luis Vargas y por último con Juan Daniel Achué; traje al mundo 3 hijos: Roberto, Graciela y Juan Carlos. He aquí este recorte de un diario falconiano del domingo 03-03-2013 donde el periodista Epifanio Petit me hizo una entrevista, tome lo que necesite, yo lo autorizo. Lo que yo deseo es que usted hable de alguno de mis cuentos en la crónica taquense”. “En realidad, señora Marina, es poco ortodoxo hacer eso, pero yo complazco siempre a las damas”.
Cito del mencionado periodista: “Entrevistar a Marina Jordán fue una experiencia única, había momentos en los que se me escurría y tomaba el timón de la conversación; Heberto León, junto a sus amigas y la prima Carmen, fueron testigos de excepción de este encuentro, en una casita de Guanadito donde la brisa paraguanera nos acompañó todo el tiempo. Su certificado de locución es el número 2451, se enorgullece de ser la primera locutora paraguanera”.
He estado leyendo algunos cuentos de la locutora Marina Jordán, me llamó la atención uno intitulado “Mis zapaticos de charol”. En este cuento, ella narra la visita de un Presidente de Venezuela a Paraguaná donde ella pierde un zapatico de charol; su madrina, mujer muy severa, ya la iba a castigar con unos correazos cuando ella le dijo, “pero madrina, si fuiste tú la que insistió que me pusiese los zapatos de las ocasiones especiales. Si el Presidente se entera que me pegaste, puede pensar que para ti su visita no fue nada especial”. 

“Profesor Muñoz Freites”, me dijo Marina Jordán, “aumentar los sueldos y las pensiones sin congelar los precios molesta a la gente, ya que el dinero se vuelve sal y agua y los especuladores, bachaqueros y acaparadores siguen haciendo de las suyas”. Por último, señala que nunca le han entregado la condecoración Cruz de Mayo a pesar de que ella, como reconoció Roberto Martínez Coll, Presidente de la Asociación Civil Colegio de Locutores de Paraguaná: “Es un ejemplo viviente de constancia, superación y excelencia profesional de la radiodifusión nacional y símbolo del trabajo creador de la mujer falconiana. Los matices de su voz quedarán grabados para siempre en el dial de la historia y gozará de la más alta sintonía del recuerdo”.