lunes, 27 de mayo de 2019

· DON PEDRO CELESTINO GUZMÁN ·



A don Pedro Celestino Guzmán lo conocí uno de estos días de mayo del 2019, en el Centro de Rehabilitación Integral de Campo Alegre, Barcelona, estado Anzoátegui, donde los excelentes terapeutas y una fisiatra cubanos (soldados de la salud, de bata blanca) imparten gratuitamente, todos los días, desde las 8:30 am, consultas y terapias a niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad por diferentes afecciones de los huesos, como también del lenguaje. Aplican hidroterapia, terapia con magneto, electricidad y lámparas de calor, y además, tienen un podólogo que trata el pie diabético y los problemas de las uñas y callos. También en este lugar hay un gimnasio con diversos aparatos para ejercicios terapéuticos y 2 camillas para masajes. La dedicación y esmero de los hermanos cubanos es impresionante, digna de admiración y elogio.
Estaba en la sala de espera aguardando la reconsulta de la médica fisiatra, cuando entablé una amena conversación con don Pedro Celestino. “¿Señor Pedro, podría usted decirme su lugar y fecha de nacimiento?” “Mi madre me parió en Barcelona, en un barrio llamado Portugal Arriba, el 15-03-1940”. Inmediatamente me vino a la mente la imagen de mi papá, quien nació y se crió en ese sector. ¿“Por casualidad usted no conoció a mi padre, Jesús Muñoz Pardo?, él era hijo de don Juan Muñoz y doña Gumersinda Pardo”.
“Caramba déjeme recordar… sí, ese nombre me es familiar. ¡Dios Santo qué pequeño es el mundo! Personalmente no conocí a su papá. Pero nunca olvidaré que mi madre decía que su abuelo don Juan fue un hombre muy caritativo; que él tenía un ganadito por Los Montones y en Cruz Verde, y todas las mañanas frente a su casa se hacía una cola de unas cuantas personas. Sencillamente, después que regresaba del ordeño le repartía leche gratis a los más necesitados. Eso se comentaba mucho en aquellos tiempos, y su hijo Juancito Muñoz Pardo siguió con esa misma tradición e incluyó a pobladores de Guamachito”.
“Luego, en la época del General Marcos Pérez Jiménez siendo yo un joven, supe por unos comentarios que escuché de unos familiares, que su padre era comunista y se la pasaba conspirando contra el Gobierno de aquellos tiempos con otros revolucionarios; si mal no recuerdo, uno de apellido Rodríguez y otro de apellido Scott, el abogado Luis Rafael Zambrano y Miguel Otero Silva, quien vivía, sí la memoria no me falla, entre las calles Juncal y San Félix, cerca de la fábrica de refrescos San Tomé Club. Recuerdo -aunque no estoy muy seguro- que también había cerca de la vivienda del escritor un depósito de leche Upaca, donde trabajaban como obreros unos falconianos de Los Taques, península de Paraguaná, quienes eran pescadores y estaban esperando que arreglaran su barco que se había dañado en una tormenta”.
“El barrio era pequeño y la gente comentaba de todo el mundo. Recuerdo que decían de su padre que manejaba un camión de Pepsi-Cola; pero viéndolo ahora desde el ángulo de la malicia, ese era su camuflaje. La ruta de vendedor de refrescos de su papá era hacia Santa Inés y esto le permitía ayudar a organizar células del Partido Comunista de Venezuela”. “Caramba don Pedro, es tan cierto lo que usted dice, que él conoció a mi madre Rafaela Freites García en ese pueblo. Y luego en 1950 estuvo preso por participar en una huelga petrolera que organizó el PCV. Él no era obrero petrolero, pero actuaba como activista político entre los trabajadores de esa industria”.
“Don Pedro Celestino cuénteme sobre su vida”. “Con gusto Muñoz. Mis padres fueron Agapito Atay y Ramona Guzmán Guzmán; como ya le dije, nací en la capital del estado, en la década de los ‘40. Mis abuelos fueron Petronila Guzmán y Raimundo Guzmán (eran primos hermanos). Tengo 5 hijos: Pedro Celestino, Noel Enrique, Carlos, Zoraida Roxeina y Edgar Daniel. Mis hermanos son María, Petra, Rafael, Leonilde y Rosa.”
“Mi familia era muy pobre, mi primer empleo fue como limpiabotas, cuando tenía 11 años en la avenida 5 de Julio, -en la actualidad Bulevar 5 de Julio-, diagonal a la calle Páez. Un fiscal de tránsito le estaba haciendo una boleta a un chofer, de pronto, sin ton ni son le dio un planazo, yo estaba a distancia de esas personas y no pude escuchar que le dijo el conductor al funcionario; pero aquel suceso dejó en mí una profunda huella. Eran los tiempos de la dictadura perezjimenista. También trabajé vendiendo los periódicos Ultimas Noticias, La Esfera y El Universal. E iba a buscar la bosta de vaca en carretilla, y se la vendía a los albañiles que la añadían a la mezcla del friso de las casas”.
“Gracias a los buenos consejos de mi difunta madre estudié y me hice profesional; pero los sacrificios que tuvieron que hacer mis padres fueron inmensos; además, yo siempre estudiaba y trabajaba. Saqué el 6° en El Grupo Escolar José Antonio Anzoátegui, me hice Contabilista en 1966, en el Instituto de Comercio Guevara Rojas, Bachiller Industrial en la Escuela Técnica Industrial en 1982 y Contador Público egresado de la Universidad de Oriente (UDO). Muy pocos de mis condiscípulos de primaria pudieron estudiar. Luego llegaron las Misiones Educativas del Comandante Chávez y se masificó la educación.” “Don Pedro unos parientes me hicieron llegar una foto de una colección en miniatura de botellas de Pepsi-Cola (de 1905 al 1998), que pertenecieron a mi padre, ¿me autoriza usted que la coloque en su crónica con su foto?” “Por supuesto que sí Muñoz”.

lunes, 20 de mayo de 2019

· DOÑA MARIA ALTAGRACIA PRADO ·


Un familiar de la difunta señora María Altagracia Prado, de nombre Ada Borges Prado, en una conversación que sostuve con ella; me contó que uno de sus antecesores peleó en la batalla de Urica, en realidad no tengo manera de confirmar esta información; pero el asunto me pareció interesante y se los narro a continuación:
“Señora Ada, hábleme de su madre y de lo que le contó en relación a la muerte de Boves, El Urogallo”. “Muñoz, mi difunta madre María Altagracia Prado nació en Bergantín, población del estado Anzoátegui, el 20-01-1920 y murió el 14-01- 1985. Sus antecesores se dedicaban al cultivo del café en haciendas de la comarca, en un caserío de nombre El Cielo, desde la salida del sol hasta su ocaso, y cuando se descuidaban los trabajadores recibían latigazos del mayoral, quien casi siempre era un zambo manumiso que estaba a favor de los españoles”.
“Muñoz Freites, mi mamá contaba que su tatarabuelo estuvo presente en la batalla de Urica como soldado de infantería de las tropas realistas y que los patriotas le hicieron prisionero, le perdonaron la vida, y se incorporó a las tropas del Centauro del Llano General José Antonio Páez Herrera. Urica es la capital de la parroquia del mismo nombre ubicada a 45 km al sureste del poblado de Santa Inés, en el estado Anzoátegui, en Venezuela, donde a pesar de ganar el combate los godos, el Asturiano de Oviedo, José Tomas Boves Rodríguez fue atravesado en el pecho por la lanza del patriota General Pedro Zaraza Manrique”.
“Se decía que ‘el Taita’ tenía pacto con el diablo y presumía de saber dónde y cómo sería el momento de su muerte. Así que marchó hacia esa población lleno de presentimientos y preocupaciones. No sólo no se conformaba con asesinar a los patriotas; sino que violaba sus mujeres, hijas, hermanas, tías y les sometía a terribles torturas”.
Cito a continuación las destacadas opiniones de algunos historiadores sobre el matarife Boves, “El Urogallo”: “La pérdida de la Segunda República fue quizá el acontecimiento que más enseñanzas dejara en el Libertador Simón Bolívar. En 1814 ocurre en Venezuela una verdadera rebelión, no de blancos criollos contra españoles colonos; sino de afrovenezolanos esclavos y cimarrones, pardos, zambos e indios; los nadie, los hasta entonces olvidados por todo precepto independentista y realista. José Tomás Boves lidera la rebelión, congrega un ejército popular que se sostiene en la rabia contra el dominador esclavista y en la necesidad de igualdad social de las mayorías pobres, segregadas principalmente por el color de su piel”.
“Boves, tan cruel, asesino y astuto como carismático y valiente, tuvo una breve carrera militar como destacado realista, pero nunca fue Jefe de Estado desde su reclutamiento el 20 de mayo de 1812 hasta su muerte el 5 de diciembre de 1814. En su momento de mayor poder era el amo absoluto de los Llanos, capaz de movilizar una hueste que empequeñecía a las unidades de patriotas, 6.000 a 7.000 jinetes y de 2.500 a 3.000 infantes, su refugio en los Llanos era un poblado llamado Guayabal, cercano a Calabozo. A nombre del rey de España le prometía libertad a los afrovenezolanos y repartir la tierra de los blancos criollos entre los llaneros.
Menos de 160 europeos eran los integrantes de su ejército, todos los demás eran venezolanos, gracias a que supo ganar para su causa el resentimiento social de la masa de negros, indios y pardos identificando a los republicanos con los blancos propietarios, dándoles una justificación para sus matanzas. Esto último no era del todo demagogia, habían sido los blancos ricos e imbuidos por las ideas de la Ilustración los que habían iniciado la Guerra de Independencia”.
“Este discurso de promesas concretas resultaba atractivo para poblaciones coloniales, que tenían nociones muy simples de lo que era la Monarquía. Desde su punto de vista, el poder real era visto por buena parte de la población como un control lejano del poder de las élites locales en defensa de los jornaleros y gente de color. En el caso específico de los llaneros, el poder real era un freno para las ambiciones de los comerciantes y terratenientes caraqueños, deseosos de usurparles sus tierras, acabando así con su modo de vida tradicional”.
Ahora bien, retornando a la crónica de la señora María Altagracia, su hija Ada me continuó contando: “Mamá parió catorce hijos e hijas: José Celestino Prado (difunto), Ligia, Antonio, Lourdes, Carmen (difunta), Gladys, Alida, Flor, Rosa, Ángel y Carlos Eduardo (difunto) y 2 morochos sietemesinos, quienes no sobrevivieron, de apellidos todos Borges Prado. El trabajo en estos campos era durísimo, mi madre heredó un terreno de sus padres donde sembraba café y caña de azúcar; pero un señor hacendado se lo quitó. Ella quedó huérfana a los 11 años y la despojaron de esas tierras. Vivió toda su vida con Rafael Borges y le ayudaba a sostener el hogar lavando y planchando”.
“Mi padre consiguió empleo como chofer en el Ministerio de Agricultura y Cría, en el Gobierno de Rómulo Betancourt; los sueldos eran miserables, se les disminuyó el 10% a los empleados públicos y a los obreros, y el dinero no alcanzaba para nada. El mantenía su familia porque su primo hermano tenía una finquita y sembraba de todo: pimentón, tomate, ají, repollo, yuca, ocumo, piña, berenjena, caña. La buseta o el Volkswagen que manejaba lo traía cargado de carne, verduras y legumbres; que traía del campo y repartía entre sus familiares y amigos; cuando falleció más de 600 personas asistieron a su funeral y entierro. Sus amigos eran gente de izquierda, comunistas, como también de derecha y hasta perezjimenistas”.
Continúa narrando la hija de Doña María: “Mi padre Rafael fue copeyano; pero estuvo influido por ideas de la Izquierda Cristiana. Mi papá fue un hombre honesto, siempre pagó sus deudas. Un año después de morir él, mi mamá falleció de tristeza y pesar, no quería comer suficiente. Mis padres están enterrados en el cementerio municipal de Barcelona. Cuando mi madre enfermó, le hizo jurar a mi hermana Rosa (quien parió 5 hijos), que no abandonaría a sus hermanos y hermanas. Ella nos ayudó durante años, trabajó como secretaria de la Asamblea Legislativa del estado Anzoátegui, luego, como secretaria de la contratista GLAMA. Y apareció Chávez, y se hizo chavista. Perdió su jubilación porque emigró al municipio Los Taques, estado Falcón, y pronto cumplirá 61 años”.
“¿Señora Ada, que opina usted de la situación actual?” “Muñoz, aquí en algunos barrios de Barcelona los precios están carísimos, los comerciantes y los bachaqueros hacen lo que les da la gana; el sábado 18-05-2019 el Presidente Maduro mandó a vender pollos a 5495 el Kg, cosa que nos alegró sobremanera; ya que por acá, se vende a 12, 14, 18 y 20 mil Bs y hasta aceptan dólares, -yo nunca he visto ese billete-, se burlan de los precios regulados”.
“Hay pollo, pero yo soy una mujer pobre que me sostengo de la pensión de Amor Mayor, de los Bonos y de la ayuda que me dan mi sobrina Yule, de una hija que ocasionalmente trabaja en casas de familia y un hijo que actualmente está desempleado. Las cajas no se ven desde febrero, no comprendo por qué aquí en Camino Nuevo no llegan las bolsas, si la mayoría somos muy pobres. Pero a pesar de todo, yo soy chavista. Voté en todas elecciones y volveré a hacer para la Asamblea Legislativa arriba a la izquierda, pulsaré con mi dedo de nuevo en los ojitos de Chávez. Mi Presidente Maduro está haciendo un gran esfuerzo a pesar del feroz bloqueo económico y no nos deja pasar necesidades; pero la gente quiere y necesita que las ventas de carne, pollo y huevos baratos se hagan cada 15 días; conozco familias que están comiendo cable porque los encargados no hacen su trabajo como debería ser y no tengo miedo de decirlo; yo hablo mucho, pero siempre digo la verdad”.



jueves, 9 de mayo de 2019

· MARBELKIS ALEXANDRA LÓPEZ QUIARO ·


El 08-05-2019, temprano en la mañana, me dirigí al Centro de Rehabilitación del Convenio de Salud Cuba-Venezuela en Barcelona, inaugurado en el gobierno del capitán José Pérez Fernández, exalcalde del municipio Simón Bolívar, en 2005 durante el mandato del Presidente Constitucional Hugo Rafael Chávez Frías, donde todos los días recibo terapia en mis manos a causa de los fuertes dolores que me aquejan; también son atendidas otras 50 personas más por diversas dolencias de los huesos y problemas que ameritan terapia del lenguaje.
En la sala de espera, entablé una amena conversación con una joven señora de nombre Marbelkis López. Ex profeso orienté nuestro diálogo hacia el rol que desempeñan las madres en la vida de todos, le expliqué que yo era el cronista oficial del municipio Los Taques, Falcón, Paraguaná y que mi profesión básicamente consistía en reseñar la vida de las personas para que las generaciones futuras tengan una exacta visión de nuestra época.
“Señora Marbelkis ¿le gustaría que sus tataranietos vieran su foto y leyesen en internet quién fue usted?” “Por supuesto que sí, lo que usted me dice es sumamente interesante y me da la sensación de que mis descendientes me podrán conocer. Quien diga que lo que usted hace es una tontería es un burdo ignorante. Ser cronista es una profesión muy importante, la historia que usted escribe son como unas cápsulas del tiempo”.
“Bien, señora Marbelkis, hábleme de usted”. “Yo soy chavista, cristiana evangélica pentecostal, tengo 2 hijos y soy soltera”. “¿Y por qué es chavista?” “Sencillamente, porque a pesar de la inflación inducida por los empresarios y comerciantes y del bloqueo económico que solicitaron algunos líderes de la oposición al Presidente Trump, del intento de golpe de estado de Guaidó y sus secuaces quienes deberían estar presos; el Presidente Maduro me hace llegar el bono de Hogares de la Patria y laboral porque estoy desempleada, mis hijos reciben cuadernos, libros y educación gratis, desayunan y almuerzan en el comedor escolar, tienen sus computadoras escolares Canaimita, estoy aspirando una vivienda por la Gran Misión Vivienda Venezuela, aunque por la casa de mi madre no pasaron a encuestar, y allí ya no cabemos y por si acaso mi Presidente Constitucional Nicolás Maduro Moros lee esta crónica, mi número telefónico es: 04262854786”. “Es posible que así suceda señora López, ya que el blog de crónicas de este humilde cronista ha recibido más de 59680 visitas hasta la fecha de hoy, y es leído en toda la República Bolivariana de Venezuela y en Latinoamérica”.
“Felicitaciones, señora López el próximo 12 – 05 - 2019 es un día importantísimo en este país, es el Día de La Madre, el ser que nos inscribe en el libro de la vida, quien nos pare, nos cría e incondicionalmente nos quiere”. “Señor, qué palabras tan bonitas, uno lo escucha hablar y como que se enamora. En verdad, que el innombrable anda siempre por el mundo tentando, pero estoy en desacuerdo con usted, ya que hay mujeres como mi vecina colombiana que no pueden parir, sino que les hacen cesárea totalmente gratis”.
“Señora Marbelkis, ¿dónde y cuándo nació usted?, hábleme de su vida” “Yo nací en Barcelona, Anzoátegui, el 28-07-1983, vivo en el barrio 29 de Marzo, mis padres son Belkis Josefina Quiaro de López y Marco Emilio López Quiaro, por mis venas corre sangre de los indígenas kariñas, mis abuelos maternos y paternos que en paz descansen fueron Edith Josefina Jiménez de Quiaro, José Isabel Quiaro, Melania Guaregua de López y Pablo Emilio López López, mis hermanos son Marcos Alexander, Edgar José, Ronny y Emilio. Mis hijos se llaman Kelvis Alberto Sarmiento López y Abimael Isaac López Quiaro. Estudié el 6° grado en la UE Manuel Farías Luces, El 5° año en el Liceo Cardona y actualmente curso en 1er Semestre de Recursos Humanos en la Universidad Simón Rodríguez, mi primer empleo fue en Ciudad Traki en Lechería, mi último empleo fue en la lonchería La Bomba haciendo arepas, tequeños, pastelitos y atendiendo al público, este negocio es de un español que ni remotamente piensa irse de Venezuela y está ubicado después del peaje de Mesones; este negocio se la pasa lleno de personas comiendo”.
“El señor Jesucristo me llena de bendiciones, Él ha obrado en mí, he visto el Poder que tiene la sangre de Cristo aunque reconozco que yo como ser humano he pecado. Recién parida, el Poder de Dios se manifestó ante mí, aparentemente todo había salido bien, salí de la sala de partos llena de alegría y felicidad, cuando de pronto entra una enfermera y me dice que mi niño tiene dificultades para respirar, se lo llevan al retén de recién nacidos en el piso 5 del Hospital Luis Razzetti.
El 25-06-2015 a las 9 pm, no sé porque no me venían a buscar para darle el pecho; eran como las 4 am, me paro voy hasta el retén y vi que mi bebé lloraba desesperado: la enfermera, cansada de cubrir sola la guardia, se había quedado dormida. La realidad fue que mi niño en la mañana comenzó a convulsionar por deshidratación y se puso grave. Le rogué al Señor Jesucristo que obrara un milagro y salvara a mi bebé. La pediatra de guardia estaba atendiendo otra criatura que estaba muy mal. No sé de donde salieron tres muy hombres muy altos vestidos de blanco, quienes entraron al retén, atendieron a mi niño y este mejoró inexplicablemente. Los hombres desaparecieron. Nadie sabía quienes eran esos señores, yo si lo sabía, eran tres poderosos ángeles que envió Dios misericordioso.”
No sé porque escuchar este relato me hizo recordar que cada minuto mueren 3 niños de hambre en el planeta Tierra por enfermedades cuya verdadera causa es la desnutrición. Y que el único lugar donde no sucede eso es en Cuba. Por el bloqueo económico hay un número considerable de niños que pueden morir en Venezuela. Que hay 12 niños en un hospital de Italia que iban a ser trasplantados de médula, y PDVSA no ha podido enviar los recursos porque estas operaciones se van a financiar con fondos de la refinería CITGO que nos robaron, que hasta la fecha han muerto 40 mil personas a causa de que no le permiten al Gobierno nacional comprar medicamentos y alimentos para el pueblo. Pero como dicen los hermanos musulmanes, Dios es Grande.

lunes, 6 de mayo de 2019

· LA MADRE ·


Hoy 06-05-2019, evocando a mi difunta progenitora Rafaela Freites García de Muñoz, a seis días del Día de La Madre escribo esta crónica sobre la constante generadora de la vida humana: la mamá de cada uno de nosotros. Es tanta su importancia para el género humano, que hasta el Hijo de Dios fue parido por una mujer. Bien pudo el Todopoderoso haber utilizado cualquier medio para traer a su Hijo al mundo, pero para vincularse estrechamente a la especie homo sapiens, una hembra fue preñada por la Divinidad y anidó en su vientre, parió y amamantó con sus pechos al Creador del Cielo y de la Tierra.
Pero para demostrarnos que madre no es solamente la que da a luz al neonato, no lo abandonó nunca, sino que lo acompañó hasta el terrible momento en que es asesinado en la cruz; allí junto con María Magdalena y Marta sufrió desesperadamente y con estoicismo por la muerte de su Jesús, el Nazareno, aunque tenía la absoluta certeza que el Cristo resucitaría de entre los muertos.
Digamos a voz en cuello, sin ninguna duda, que el amor de la madre por el hijo que llevó en su vientre, o mejor aún, el que crió, estuvo, está y estará siempre más allá del bien y del mal, más allá de cualquier circunstancia. Ella fue y es la hembra de la especie capaz de sacrificar todo, hasta su vida, por el hijo bien amado. No sólo fue la que nos parió con dolor, sino la mujer que no nos abortó a pesar que éramos el fruto prohibido del pecado; quien respetó nuestra vida cuando todos los hipócritas pecadores arrojaban sobre ella la primera piedra. Se sintió orgullosa de inscribirnos en el libro de la vida cuando la estupidez humana la señalaba por llevarnos en sus entrañas y parirnos.  
No sólo fue la que nos parió con dolor, sino quien trayéndonos al mundo, nos crió con cariño y ternura. Procuró que fuésemos personas de bien y saliéramos de las tinieblas de la ignorancia con sus sacrificios, esfuerzos y duros trabajos. Ella lloraba ante nuestras tristezas y fracasos, velaba ante nuestro lecho de enfermo e hinchaba su corazón de gozo ante nuestras alegrías y triunfos. Nos iluminó el camino recto y justo, siendo recta y justa; nos dio el consejo y el consuelo oportuno; nos enseñó a ser tolerantes y a oír a los demás, ya que practicaba la tolerancia y oía. De ella aprendimos, con su ejemplo, a sacrificarnos por el prójimo que sufre y padece, a compartir lo nuestro con los más necesitados, y ayudar a los demás sin esperar nada a cambio.
No sólo fue la que nos parió con dolor, sino el ser humano que nos enseñó a temblar de indignación cada vez que se comete una injusticia en el mundo, a justificar nuestra existencia por ese gran amor y dedicación que debemos tener por el prójimo: ¡los pobres!, porque temblaba de ira ante la iniquidad, y justificaba su vida por el amor y dedicación a los menesterosos. Estuvo siempre al lado de los que tienen hambre y sed de equidad, al lado de los perseguidos por la causa de la justicia. Ella vive y vivirá en nuestra mente: aunque su presencia ya sea inexistente, es de nuestra vida lo más valioso. ¡Qué no hiciéramos por ella! Si ella hizo y haría cualquier cosa por nosotros, debido a ese inmenso amor que nos profesó, y nos profesa en esta y en cualquier realidad posible en la cual se encuentre.
¡Madre! Seguros estamos que, si fuéramos los criminales más terribles del género humano y nos llevaran al patíbulo a causa de nuestras maldades, sólo tú intentarías detener la mano del verdugo; si nuestros cuerpos estuvieran cubiertos de llagas, escaras y pústulas malolientes y supurantes sólo tú nos curarías sin asco, ya que en cada uno de nosotros amaste y amas a todos los hijos del mundo. La hembra que tiene un hijo no es sólo madre de éste, sino de todos los niños del universo.
¡Madre inolvidable! Guardamos tu amor como el ensueño santo y le consagramos el más puro y luctuoso canto, porque así como la vida es de la muerte, así siempre por toda la eternidad hemos de quererte. Nadie olvida a su mamá, ella siempre está y estará presente hasta que exhalemos nuestro último suspiro.