martes, 25 de octubre de 2022

DON GUILLERMO FERNÁNDEZ EPIEYUU, PÜTCHIPÜ'ÜI

 

El Día de La Resistencia Indígena a Elías González, el palabrero (pütchipü'üi, "hombre sabio") de la comunidad “La Flor de La Guajira” en Jayana, le prometimos publicar la biografía de su honorable y respetado abuelo materno, don Guillermo Fernández Epieyuu, en el Blog del Cronista Oficial del Municipio Bolivariano Los Taques, Paraguaná. Sentimos inmenso orgullo al realizar esta crónica de tan notable e insigne venezolano.

Hemos tenido noticias que los hermanos wayuu nos leen a lo largo y ancho de su territorio, por lo tanto a Don Guillermo, a sus familiares, amistades y a todo el pueblo wayuu, desde la  península de Paraguaná les enviamos un gran saludo y abrazo del tamaño del universo. La información llegó a nuestras manos hace poco, nos hubiese gustado publicarla en fecha más cercana al 12 de octubre, les rogamos nos disculpen cualquier error en la transcripción pero el cronista está  escribiendo con la mano izquierda y es diestro. Pero basta de aclaratorias, he aquí el escrito.

  

Don Guillermo Fernández Epieyuu, pütchipü'üi y palabrero wayuu, de la casta epieyuu, conocido por todos por 'Mawaata' (el perdido, pero que se aparece cuando es necesaria su presencia) nació el 8 de febrero de 1949, en la comunidad de Wososopo, via Cojoro-Castillete, parroquia Alta Guajira, municipio Guajira, donde se marca el límite entre Venezuela y Colombia -aunque para los wayuu las tierras ancestrales son un solo territorio que los alijunas españoles le despojaron a los primeros pobladores-. Sus padres fueron Regina Epieyuu Wimpujewar -de la comunidad Ololoo, al norte de Nazaret en la Alta Guajira- y Eduardo Epieyuu, oriundo de Wososopo. Allí en esa comunidad, vía Cojoro, está el camposanto de la familia Epieyuu donde reposan los restos de los difuntos, para descansar un tiempo y luego se hacen los traslados para el panteón de Holholho que es la tierra natal de los Epiayuu.

 

En esa pequeña ranchería, Wososopo, fueron criados sus cinco hermanos, ya difuntos: José María, María Concepción, José Agustín, Teresa y Eduardo Fernández Epieyuu. El señor Guillermo se unió con su compañera de vida la señora América Fernández Uriana, quien fue madre de sus hijos, cinco varones y cinco hembras: Lila, Edixon, Gladys, Santiago, Leicy, Magalys, José de los Santos, Matilde, Ovidio y Luis Guillermo Fernández Uriana. El señor Guillermo Fernández Epieyuu se dedicó a la cría de ganado y a resolver las diferencias -palabrero- entre sus familiares y amigos; por esta razón es muy apreciado y respetado por todos los pobladores.

 

Don Guillermo, a mediados de 1960, se fue a vivir a la Baja Guajira (a Guarero, vía Guana, comunidad Caujarito, cerca de la frontera) en una finca de su propiedad, el fundo La Nueva Lucha, donde fueron naciendo y criándose sus hijas e hijos, quienes estudiaron en la Escuela Básica Nacional Yaguásiru y en el Liceo Santa María de Guana. Allí se aprende de todo para defenderse en la vida y hacer prosperar la tierra Guajira, a ser mujeres y hombres importantes. En otros tiempos hubo mucha ofensa y violencia en esos lugares, y el palabrero mediaba el entendimiento y la búsqueda de la paz entre las castas y familias.

 

 Para el wayuu es importantísima la educación de sus hijos e hijas, que las mujeres y hombres sean valiosos para trabajar. Sus hijos se destacan de la siguiente manera: José de los Santos, apodado 'el Cuya', sigue a su padre como palabrero; Santiago, jubilado de la policía del estado Zulia; Ovidio es docente en Alta Guajira, El Taparo, vía Cojoro; Matilde es Licenciada en Educación; Edixon es pintor; Lila es modista en mantas y costuras; Magalys y Leicy son artesanas: hacen chinchorros, hamacas y bolsos de diferentes tejidos; Luis Guillermo se dedica a la cría de animales, todos se mantienen con diferentes actividades productivas. 

 

Finaliza refiriendo Elías González: “Mi abuelo materno don Guillermo es reconocido actualmente por una organización llamada 'Uttaa' en la Alta, Media y Baja Guajira, es un hombre sabio, honesto, muy hábil para dar consejos; es viudo de América desde hace 17 años. A pesar de sus 93 años se encuentra en perfecto estado de salud, tiene una buena memoria y receptividad para atender los problemas de su pueblo, sólo le falla la vista. Reconoce a las personas y distingue a los familiares, amigos, parientes que lo visitan; es alegre, divertido, canta Jayechii, vive con sus hijos en la comunidad de Amunol, vía Cojoro, en la Alta Guajira al norte de Paraguaipoa, ese sitio es muy conocido porque allí se concentran para arreglar los problemas familiares”.

jueves, 13 de octubre de 2022

LA COMUNIDAD LA FLOR DE LA GOAJIRA DE JAYANA


En Venezuela, desde el año 2002 se denomina al 12 de octubre Día de la Resistencia Indígena, un cambio promovido e impulsado por el líder de la revolución bolivariana, Hugo Chávez, y las organizaciones originarias. Esa denominación busca recordar la lucha de esos pueblos en contra de las fuerzas españolas que venían a exterminar y saquear las riquezas de la región. Los wayuu el 12 de octubre conmemoran el día con cantos, danzas, bailes, lecturas en dialecto wayuu de proclamas conmemorativas, canciones, cantos ancestrales, comelonas, abundante chicha fermentada y danzas ancestrales.

En Los Taques, La Flor de la Goajira recordó el Día de la Resistencia Indígena. La comunidad Wayuu del sector Jayana del municipio Los Taques, a través del Movimiento Indígena Akumajaa Wakuaipaa (Akumajaa es la diosa de la cerámica en la cultura wayuu, hija de Kaí el sol y hermana de Walekerü la diosa de los tejidos; Wakuaipa significa “nuestras costumbres”), conmemoró la fecha, donde contaron con las comunidades de 4 de Febrero, El Cardonal y Madre Cecilia, y la presencia de la licenciada María Arcaya, quien compartió y presenció bailes y costumbres de las nuevas generaciones indígenas, enseñadas por sus ancestros.

Narra Elías González -vocero y palabrero- que su esposa Ana Isolina Montiel Navas es vocera suplente del asentamiento La Flor de La Guajira en Jayana, Municipio Bolivariano de Los Taques, Paraguaná. Allí viven 20 familias indígenas de las etnias Wayuu y Añuu. Los primeros en llegar en el 2005 fueron Ender Ríos, cuya señora es Oli Barroso y tiene dos hijos. Los wayuu son pobladores laboriosos y honrados, mantienen y preservan los usos, costumbres y leyendas de sus antepasados, sin embargo aprendieron del alijuna a ser carpinteros, albañiles, pintores, cabilleros, plomeros y mecánicos. Hay numerosos  infantes, quienes ingresaron a la educación inicial.

En la Media y Alta Guajira es lícita la unión de un hombre con varias mujeres, ello depende de los bienes que tenga el varón para pagar la dote. En La Flor de La Guajira de Jayana todas las familias son monogámicas. Estas se distribuyen como sigue: seis de casta Epiayuu, donde las féminas pueden ser también voceras, tienen los mismos conocimientos y capacidades para resolver problemas entre familias. Las demás familias pertenecen a las siguientes castas: una Pushaina, tres Epiayu, tres Uriana, una Capuana, dos Jayalhiyuu, tres Aspushana y 1 Añuu (que tiene distinto dialecto).


En los wayuu, el parentesco se establece a través del tío materno, el sobrino mayor le sucede y hereda sus peculios. Este tío asume bastantes compromisos del padre. Según la ley guajira, cuando se ofende a una persona se agravia a toda la familia; el palabrero "pushipu" media el agravio, estableciendo una cantidad de dinero o ganado, sea cabra u ovejo, según la magnitud de la ofensa. Es común la unión de parejas de la misma casta, a la púber se le prepara para los esponsales.

Había niños y niñas que estaban sin presentar, a pesar de la autorización del CNNA, ya que hubo un Jefe Civil hace tiempo en Los Taques que no quería registrarlos porque como los wayuu nacen en sus casas no tenían la papeleta que dan en el Hospital, el Ambulatorio o en el CDI. El Profesor Muñoz medió en esta controversia  y el problema se resolvió. Recuerda Elías que hace años el profesor Muñoz Freites gestionó ante el entonces Alcalde doctor José Luis "Pepe" Iglesias una prótesis de cadera para la señora doña Inés Montiel, y fue operada, pero esta se le movió y hubo que recluirla en el Hospital Cardón. 

El señor Elías González se ha ganado la jerarquía de vocero por sus buenas acciones. En Los Rosales - Creolandia hay una comunidad Anteshirru (sitio de llegada). "Profesor Muñoz Freites, yo leí una crónica que usted escribió que fueron 66 millones de indígenas los asesinados por los españoles cuando la invasión de los europeos a América; también he leído y oído que fueron 80 millones de ancestros los aniquilados. En definitiva ¿cuántos fueron?"  "Elías, los historiadores en la actualidad hablan de un genocidio de 80 millones seres humanos. El más grande exterminio de la historia".