"La ganadería en Venezuela.
La introducción de la ganadería en Venezuela, siguió la ruta de la corriente colonizadora. Con los primeros colonizadores llegó el ganado vacuno al país, que estaba destinado al consumo de las personas que participaban en el proceso de colonización del territorio, la calidad de los pastos, fue un factor determinante en el fomento y desarrollo de la actividad pecuaria en nuestra patria y se centra la producción de ganado en el Tocuyo, que para el año de 1546 contaba con una producción animal de 1.000 caballos, 200 yeguas, 300 vacas reproductoras, 500 ovejas y suficientes cerdos, para el consumo y distribución. Esta producción fue en aumento ya que para el año 1553 ascendió la producción a 1.000 caballos y yeguas, 3.000 vacas y 12.000 cabezas de ganado ya que el Tocuyo fue el polo de desarrollo de la actividad pecuaria en Venezuela.
Con la producción de ganado en el Tocuyo, también fue marcando la ruta del proceso colonizador en lo que después fue la Capitanía General de Venezuela ya que esta actividad se convirtió en la principal actividad económica de los conquistadores, lo que permitió la fundación de los primeros hatos y posteriormente los centros poblados. A finales del siglo XVI se habían establecido hatos para la cría de ganado, en el Tocuyo, Barquisimeto, Maracaibo, Valencia, San Sebastián de los Reyes, los Valles de Aragua Caracas y otras zonas de la región de influencia del centro de reproducción del tocuyo, dicha carne en los primeros tiempos fue para el consumo interno El fomento de la actividad pecuaria era evidente; su mercado primitivo, fundamentalmente local, se orientaba al abastecimiento de carne a través de la distribución de las pesas entre los dueños de hatos, sistema que suscito no pocas rivalidades. A nivel regional, la ganadería cobro auge como actividad económica y progresivamente fue determinando las pautas de vida y conducta en las comarcas llaneras. A las cabezas de ganado que se contaban en los hatos fundados, se sumaban las de ganado cimarrón que deambulaban libremente por las sabanas, poblando grandes extensiones desde oriente hasta El Tocuyo y desde los llanos de Barcelona hacia el sur; de forma tal que la existencia previa de ganado facilito la penetración de hacendados ganaderos en territorios que para mediados del siglo XVII permanecían ignotos. Las relaciones de los gobernadores indican que paralelamente al fomento demográfico, se incrementó la explotación extensiva del ganado vacuno. Por otra parte, la acción de las misiones contribuyo notablemente a esta situación con la fundación de hatos de comunidad que, en esencia, representaban verdaderas escuelas pecuarias a través de las cuales se fue adiestrando al indígena en el desarrollo de esas faenas. Al despuntar el siglo XVII se habían instalado con notorio éxito hatos para la cría de ganado en el Valle de Caracas, San Sebastián de los Reyes, Valencia, Barquisimeto, el Tocuyo, Carora, Guanare, Trujillo, Maracaibo, Mérida, La Grita, San Cristóbal Pedraza y Barinas; se contaba así mismo, con una notable producción en las islas de Margarita, Coche y Cubagua y, por otra parte, se iniciaban las incursiones de hacendados ganaderos hacia los Llanos conocidos como de “la otra banda de Apure’’ Ya a mediados del siglo XVIII, y tras una serie de altibajos, productos del sacrificio indiscriminados de reses para aprovechar sus cueros y grasas, la ganadería se presentaba como una actividad de amplia acogida, y definidora de la vida económica en las comarcas Llaneras. Las relaciones de los viajeros y las visitas de los gobernadores, indican que, a mediados del siglo XVIII la fundación de sitios de hatos respondía, precisamente, a la abundancia de ganado cimarrón en las sábanas, lo cual imprimía a la actividad el carácter de una ganadería pastoril fundamentada en la caza de cimarrones, a la llegada del segundo intendente, Francisco de Saavedra, en la década de 1780, la ganadería como actividad económica se encontraba en franca expansión a nivel del mercado local: esta situación se había visto altamente favorecida con la coyuntura de la guerra de España con Inglaterra por la independencia de las 13 colonias (Estados Unidos) que genero una inusitada demanda de carne y en consecuencia impulso un aumento en los precios fijados a esta. Saavedra aprovecho hábilmente tal coyuntura para fomentar el desarrollo de relaciones comerciales con el mercado de transito del Caribe y al efecto, oriento toda su política económica hacia el logro de una verdadera fluidez comercial con las colonias extranjeras del Caribe; al lograr su propósito, la situación favoreció notablemente el intercambio comercial de ganado en pie y otros derivados con la región de manteniéndose esta situación a pesar de haber culminado la guerra. A nivel de área económicas venezolana, a fines del siglo XVIII, la actividad ganadera se extendía aproximadamente hacia unas 190 leguas que comprenden todo el vasto territorio de las comarcas Llaneras hasta la cordillera andina. Para 1786, de acuerdo con la relación de funcionario José de Castro y Araoz, se contaban en la provincia de Caracas (Exceptuando en este caso los territorios de San Jaime, Nutrias, Meta y Apure) un total de 365 hatos de ganado mayor que totalizaban 649.153 cabezas de ganado vacuno. Un año más tarde, tras la visita del gobernador de Barinas Fernando Miyares González a los territorios descubiertos en la ‘’otra banda de Apure’’ (actual estado Apure y territorios cercanos) y a toda la provincia de Barinas, se registraron un total de 504.896 cabezas de ganado vacuno, que sumados al resto del territorio arrojan una cantidad de 1.154.049 cabezas de ganado la producción por años regulares alcanzaba cifras notables y la demanda a nivel del mercado local y del Caribe, la ubicaban entre los principales renglones de producción y comercialización a comienzos del siglo XIX, la situación se mantenían estable; sin embargo, la Guerra de Independencia introdujo modificaciones sustanciales que afectaron profundamente el panorama económico de la actividad ganadera. La guerra volvió a imprimir a la ganadería su primitivo carácter de abastecimiento del contrabando de cueros, la acción desoladora de los cuatreros que sacrificaban las reses sin discriminación de edad o sexo, y por otra parte, las migraciones forzosas de hateros sus rebaños huyendo de las tropas realista o patriotas, así como la incorporación, voluntaria o involuntarias, de muchos peones a las filas de los ejércitos, todo lo cual se tradujo en un abandono progresivo de las faenas y en consecuencia, un una grave crisis en el sector ganadero en épocas de la independencia, no podemos olvidar que el proceso independentista reposo sobre la ganadería venezolana y sobre todo en la ganadería que se encontraba en la basta geografía de la provincia de Barinas, a la cual pertenecía el territorio que hoy conforma el actual estado Apure.
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Omar Viana, Cronista del Municipio Muñoz del estado Apure Venezuela,
Difiero del Cronista Oficial de Bruzal, estado Apure en lo siguiente: 1) la ganadería comenzó en Venezuela en 1527 en la isla de Margarita.
ResponderEliminar2) Los españoles no eran conquistadores sino invasores del territorio de los indígenas y las indígenas.
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ResponderEliminarColega Cronista Oficial de Bruzal, estado Apure Omar Viana, la ganadería en Venezuela fue introducida por el invasor español Marcelo Villalobos que recibió la autorización de la Real Audiencia para poblar la isla con ganado vacuno.
ResponderEliminarColega Cronista Oficial de Bruzal, estado Apure, la ganadería en Venezuela fue introducida en 1527, fecha en que el invasor español Marcelo Villalobos pobló la isla de Margarita con ganado vacuno para carne y transporte.
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