La vida no es digna de ser vivida sino cuando la
ennoblece el ideal social de ayudar al prójimo. En estos días, comenzando
diciembre del 2019, nos enteramos por medio de una publicación del luchador
social y político Johnny Ramírez, de Creolandia, del sensible fallecimiento de
una persona muy apreciada por los moradores de esta populosa comunidad del Municipio
Bolivariano de Los Taques, Falcón, República Bolivariana de Venezuela.
Hay personas que nunca mueren porque dejan
huellas profundas en las mentes y corazones de sus parientes y vecinos; es el
caso de la señora Aura Vargas, mujer guerrera de tantas luchas por el bienestar
de los habitantes de la comunidad 4 de Febrero, practicaba el bien y compartía lo
que tenía con los más necesitados.
La señora Aura fue una persona de profundos
principios morales, humanistas y socialistas, en ese batallar constante por una
existencia mejor. La conocimos allá, en los primeros años de la década de los
2000. Me la presentaron Carmen Meléndez y la señora Wendy, personas también profundamente
compenetradas con las necesidades de los pobladores del municipio. Recuerdo que
la señora Vargas, era pariente del doctor Henry y Richard Weffer, vivía al
frente de la Escuela Bolivariana 4 de Febrero, donde en muchas oportunidades hizo
suplencias. Esta mujer trabajadora fue y siempre será un modelo a seguir por
las generaciones actuales y futuras de taquenses, ya que no solamente trabajaba
duro por el bienestar de sus hijos, sino por mejorar las condiciones de
existencia de los habitantes de su comunidad. Seguros estamos que su recuerdo
permanecerá en la mente de todos los que la conocimos. Paz a su alma, y nuestro
más sentido pésame a sus familiares y deudos, y les decimos: “No están solos en
su dolor, nosotros estamos con ustedes.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Sus comentarios son importantes para el autor. Por favor, utilice un lenguaje cortés y respetuoso al dejarnos saber su opinión acerca de lo publicado.