Sigo
en la patria chica de mis difuntos padres, en espera que reacondicionen el
quirófano del CDI Camilo Cienfuegos de Campo Claro, donde seré operado. En esta
situación he conocido muchas personas; es el caso del Vocero de Chamba Juvenil
y Somos Venezuela, del Consejo Comunal Conciencia Revolucionaria de El Viñedo,
Barcelona, Anzoátegui, Miguel Jesús Chacín Guaita.
Ver a
una persona joven haciendo trabajo social con disciplina y responsabilidad,
pendiente de las necesidades y las soluciones de los problemas de las personas,
de manera desinteresada, sin ningún tipo de salario, sólo por conciencia social
inspira respeto, consideración y admiración. Este muchacho visita hogares todos los días, en las calles 14 a la 21 de El Viñedo, pendiente de que las personas se organicen, reciban las bolsas CLAP mensualmente, de quienes están enfermos, de que los ancianos, niños y mujeres embarazadas tengan asistencia médica y medicinas, y que los jóvenes consigan empleo. Sin duda, Miguel Chacín Guaita es un personaje del pueblo, quien debe servir de modelo a todo el mundo, y por esta razón escribo su crónica.
inspira respeto, consideración y admiración. Este muchacho visita hogares todos los días, en las calles 14 a la 21 de El Viñedo, pendiente de que las personas se organicen, reciban las bolsas CLAP mensualmente, de quienes están enfermos, de que los ancianos, niños y mujeres embarazadas tengan asistencia médica y medicinas, y que los jóvenes consigan empleo. Sin duda, Miguel Chacín Guaita es un personaje del pueblo, quien debe servir de modelo a todo el mundo, y por esta razón escribo su crónica.
El
02-06-2018 Miguel visitó la casa en donde estoy alojado, y notó que yo estaba
sin afeitar y me dijo: “Profesor Muñoz Freites, mañana le traigo a mi primo
Marcos Guaita para que le afeite”. “Se lo voy a agradecer, Miguel”, y se fue
con prisa a llevarle a una vecina un jarabe para la tos que torturaba a su bebé,
que le enviaba una doctora cubana quien había examinado al niño. Al otro día
regresó con su pariente, pero hubo una falla eléctrica y mientras esperábamos
la electricidad, le dije: “Miguel, hábleme de su vida”.
“Profesor
Muñoz Freites, yo nací en Barcelona el 25-08-1999; soy hijo de Miguel Chacín
Figuera y de Roselina Guaita, tengo 6 hermanos: Daniel, Jorge Luis, Nilda,
Franklin, Milagros con apellido Guaita y Daniel Palma. Mis abuelos paternos,
Leopoldo Ramos y Celestina Figuera (fallecida) y los maternos, Ramón Guacarán -quien
tiene 98 años- y mi abuela Isabel Guaita (fallecida)”.
“Estudié
hasta 9° grado en la U.E. General José Antonio Páez en el año 2014, y el 5to
año en Ciencias, en el Liceo Bolivariano Miguel Otero Silva en el 2016. Inicié
mis estudios en administración de empresas en febrero del 2017, en la Misión
Sucre. Mi primer empleo fue en la Distribuidora Herrera, en Potoco, donde
laboré 6 meses”.
“Miguel
¿puedes relatarme alguna situación extraña que hayas vivido?”
“Por
supuesto, profesor. Me sucedió que en una oportunidad acompañaba a un amigo que
visitaba a su novia por su cumpleaños, y se nos hizo tarde para regresar a
nuestras casas; de pronto escuchamos un ruido y volteamos, y vimos un perro que
venía en zigzag, y a medida que se acercaba iba creciendo, entonces mi amigo me
dice: ‘reza y corre todo lo que puedas, esto es algo sobrenatural’. En la
carrera, divisamos delante de nosotros muchas personas y unos carros negros con
las luces encendidas, de pronto al llegar al sitio no había nada, todo
desapareció como por arte de magia; imagínese el susto, que cada uno corrió
hacia sus casas con los pantalones mojados”.
“Profesor
Muñoz Freites, mi gran preocupación es que las bolsas del CLAP lleguen cada 15
días, ya que los víveres que venden los comerciantes, como los que venden los
bachaqueros, tienen unos precios en la mañana y en la tarde los vuelven a
subir, el pueblo quiere que el Presidente Maduro los meta presos”.
Profesor
¿usted es de Falcón?” “Miguel, yo soy el cronista oficial del municipio Los Taques, en Paraguaná” “Profesor,
yo deseo conocer a toda Venezuela, yo conozco mucha gente que trabajó en ese
municipio, en la Refinería de Amuay, y me contaron que allí hay unas playas
bellísimas en una localidad que se llama Villa Marina; también me relataron que
en Coro hay un desierto con montañas de arena que llaman médanos”. Rosa le
dijo: “Miguel, nosotros vivimos a unos minutos de las playas, Dios mediante,
después que operen a Muñoz, puedes pasar unas vacaciones en nuestra casa de
Jayana”.
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